rodeados de los trinos de las aves que pueblan los frondosos arbustos
y acariciados por los rayos de sol
que juguetean con la sombra fresca de este coqueto rincón.
Sony α100, SAL 1870 f/3.5-5.6
35 mm, 1/25 seg, f/5.6, ISO 100, flash n/a, sin trípode
© 2008-2009 MayteVidal
Sony α100, SAL 1870 f/3.5-5.6
35 mm, 1/25 seg, f/5.6, ISO 100, flash n/a, sin trípode
© 2008-2009 MayteVidal
Un lugar coqueto y paradisiaco.
ResponderEliminarEncuentras sitios encantadores.
Saludos.
Jajajajaja, esto parecía que lo habían puesto allí a propósito para la foto ;)
ResponderEliminarGracias por tu visita y tu comentario, Mª Angeles.
Feliz dia del trabajo!
Besos!
coqueto y a lo que se vé privado, la verdad es que sí apetece salir al campo a comer, en cuanto nos sale un dia bueno allí que vamos todos. ¿donde está este fabuloso comedor?
ResponderEliminarPues... sigue estando en el monasterio de Piedra ;)
ResponderEliminarSaludos, Ripley!
Hay tanta belleza en el Monasterio de Piedra, que tengo decidido hacer una escapada el día menos pensado.
ResponderEliminarQuizás, siguiendo tus consejos, el otoño sea la estación perfecta para llegarme hasta allí.
Saludos.
Una foto preciosa Mayte... encuentras unos sitios encantadores, ehhh... felididades de nuevo.
ResponderEliminarTa bien comer fuera...
ResponderEliminar...pero en esa mesa los arboles te comen a tí...
buena foto, saludetes, majilla
¡Qué fresquito se tiene que estar ahí en veranito! Vaya, creo que ya te lo he dicho antes pero ¡¡me encanta tu casa!! ;-). Sí que son paisajes con alma, sí... Saludos.
ResponderEliminarEs un sitio en el que apetece quedarse a comer, bien buscado. Saludos.
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